México rechaza iniciativa del Congreso de Estados Unidos que pretende imponer impuesto a remesas: una medida discriminatoria y violatoria del derecho internacional
La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dijo esta mañana, junto a los titulares de Hacienda, Relaciones Exteriores y la Unidad para América del Norte, que en México, “No estamos de acuerdo con este impuesto. Primero, porque es discriminatorio; y segundo, porque viola un tratado firmado entre México y Estados Unidos”. Esto al fijar una postura frente a la iniciativa promovida por legisladores del Partido Republicano en el Congreso de los Estados Unidos que busca imponer un gravamen del 5% a las remesas enviadas desde ese país hacia otras naciones, incluida México.

Sheinbaum advirtió que esta propuesta viola el Tratado para Evitar la Doble Tributación firmado entre México y Estados Unidos desde 1994, y representa un acto de discriminación fiscal contra millones de trabajadores migrantes que ya pagan impuestos en el país vecino.
Remesas: pilar económico y vínculo social
El secretario de Hacienda, Edgar Amador Zamora, subrayó que las remesas enviadas a México en 2024 ascendieron a 64,700 millones de dólares, equivalentes al 3.5% del PIB nacional. De estas, el 97% proviene de mexicanos en EE. UU., principalmente desde California, Texas y Colorado.
Además, detalló que imponer un impuesto adicional constituiría una doble tributación sobre ingresos que ya fueron gravados por el Internal Revenue Service (IRS), lo que contraviene el artículo 25 del tratado bilateral vigente.
“Esto implicaría una violación al principio de no discriminación fiscal. Es un atentado directo a los derechos de nuestros connacionales”, puntualizó Amador.
Respuesta diplomática inmediata y coordinada
El canciller Juan Ramón de la Fuente explicó el proceso legislativo que sigue esta propuesta en la Cámara de Representantes de EE. UU., donde se incluyó en el paquete presupuestal discutido por el Comité de Medios y Procedimientos.
Desde el 13 de mayo, por instrucciones presidenciales, se envió una carta formal firmada por el embajador Esteban Moctezuma y Roberto Velasco, dirigida a los congresistas miembros del comité, expresando el rechazo del Gobierno de México y exponiendo argumentos jurídicos y económicos en contra del gravamen.
Asimismo, anunció que la próxima semana, el embajador Moctezuma sostendrá reuniones con organizaciones de mexicanos en EE. UU. y que se prepara una visita de una delegación del Senado mexicano, con representación de todos los partidos, para dialogar con legisladores estadounidenses y reforzar la defensa de las comunidades migrantes.

Impuesto discriminatorio y sin fundamento legal
Por su parte, Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte, alertó que la redacción de la iniciativa establece que solo se aplicaría a personas no ciudadanas estadounidenses, lo cual podría afectar incluso a residentes legales o trabajadores con visa, profundizando el carácter discriminatorio de la medida.
“Se trata de una medida selectiva y carente de fundamento legal internacional, que establece una diferencia entre ciudadanos y no ciudadanos de EE. UU., incluso si estos últimos contribuyen fiscalmente”, remarcó.
Llamado a la acción y unidad binacional
La presidenta Sheinbaum convocó a las comunidades migrantes a enviar cartas y pronunciamientos a sus representantes en el Congreso de EE. UU., y reiteró que el Gobierno de México, junto con las Cámaras del Congreso y las fuerzas políticas nacionales, mantendrá una postura unificada y activa para detener esta iniciativa que atenta contra los derechos de los migrantes.
Finalmente, hizo un llamado al gobierno estadounidense a considerar mecanismos de recaudación más equitativos y no cargar con nuevas obligaciones fiscales a quienes menos tienen.